Como buenos castellanos, en mi casa siempre ha existido una gran tradición de comer cordero. Es una carne que difícilmente suele faltar en las mesas a lo largo y ancho de la meseta castellana. Va en los genes del buen castellano el comer cordero.
Yo tengo una anécdota familiar al respecto que prueba cuán relacionados están el cordero y el buen comer en Castilla. Esta es una escena que se ha repetido cada vez que he ido a un restaurante con mis padres:
- ¿Qué vais a comer? - pregunto.
- ¿Qué es lo que hay? - preguntaría a su vez mi madre.
- Pues hay de todo. La carta es interminable, yo no sé que elegir - es lo que podría yo responder.
- Yo quiero unas chuletas de cordero a la plancha - es lo que siempre contesta mi madre - pero que sean de lechal.
- Pues cordero no tienen.
- ¿Qué no tienen? Entonces aquí no tienen de nada - sentencia siempre mi madre.
Curiosamente, si preguntas al camarero, en el 50% de las ocasiones resulta que tienen chuletas de cordero fuera de carta. Es así, supongo que las deben tener ahí en el congelador esperando a que llegue algún cliente como mi madre.
Para el buen castellano, no hay restaurante que se precie sin un cordero en su carta. Y la forma en que hacen y presentan el cordero es otro de los grandes indicadores de la calidad de un restaurante. El castellano juzga el buen hacer de una cocina por el cordero asado. Que el cordero asado está como cocido y duro cual suela de zapato, mejor no volver pues aquí no saben hacer ni unas lentejas. Que el cordero es suave, tierno y en su punto, aquí si que tienen buenos cocineros. Así sentencia el castellano viejo.
En Castilla el cordero suele estar sometido a pocas innovaciones. Chuletas de cordero a la plancha, a la parrilla o fritas, cordero asado, cordero al ajillo y cordero con tomate son el sota, caballo y rey de la gastronomía bovina. Cierto es que hay tradicionales platos castellanos que otorgan grandes honores al cordero, como el cordero a la pastora o el cordero a la jardinera. Pero ya a partir de ahí poco más se puede rascar.
Por eso una simple y sencilla receta de cordero al limón como esta puede llegar a ser considerada como una auténtica blasfemia por parte del buen castellano viejo.
Esta es una receta fácil de hacer, ideal para dar un nuevo toque a esas chuletas a la plancha que tan aburridas nos pueden llegar a resultar.
Ingredientes
- Chuletas de cordero (del costillar)
- Medio limón
- 1 Diente de ajo
- Romero
- Aceite, sal y pimienta.
Preparación
1. Salamos las chuletas y ponemos a la plancha con un poquito de aceite en la sartén.
2. Echamos a la sartén el diente de ajo machacado (a mi me encanta el ajo, así que siempre echo alguno más)
3. Exprimimos el zumo del medio limón directamente sobre las chuletas. El limón estrujado, lo echamos también a la sartén.
4. Añadimos el romero y la pimienta.
5. Una vez las chuletas en su punto, servimos.
buenísimas, con el romero y el limón, me encanta el cordero lechal, tu madre tiene razón, jejej, bss
ResponderEliminarPues tu madre sabe muy bien lo que dice, porque donde se pongan unas costillas ,como estas de tu foto, que me han dejado con la boca abierta no se pone nada, cuando la carne es rica como bien dices la de castilla, no necesita de mas ingredientes, de los que tu le has puesto, solo ver la foto dan ganas de empezar a comer. Mil besicos
ResponderEliminarComo buena vallisoletana, esto me pierde. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarCesar, de verdad que como me gusta leerte.Cuanta razón!! Mis padres son andaluces, así que te puedes imaginar en mi casa el cordero ni entraba, especialmente porque a ellos no les gustaba.
ResponderEliminarMenos mal que tengo una suegra que lo hace estupendamente. Ahora por mucho que esta receta pueda ser una blasfemia, te digo que yo me tiraba en plancha a por esas chuletas!! :)
besos
Pero que ricooooooo!! a mi me encanta el cordero, pero como dice mi hermana en casa...ni olerlo!!! a ver si lo hace ella...
ResponderEliminarQue ilusión tu comentario, después de la rceta de la tarta guiness que hizó Carmen ¡te leo!,
y ya te tengo fichado, lo de los consejos de bellezaa no es algo muy nuestro lo que pasa que hoy era "dia diferente",hacemos de todo, pero seguro que las recetas y talleres culinarios van más contigo!! ;)
Un saludo de la otra Quintano
Madreeee, que buenas chuleticas..!! Con unas patatas fritas, mmmmmmmm que rico.., besos guapetón..!!
ResponderEliminarDe pequeña me comía todo todo todito de las chuletitas, casi no dejaba los huesos, cómo me volvían de loca!
ResponderEliminarY bueno, ahora también, qué pena que no pueda comerlas... estas con romerito tienen que estar de vicio! Besos
Ummmmm me encantan!!! Tienen una pintaaaaa... Saludos :)
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